En el marco del Día Mundial de la Diabetes, que se conmemora cada 14 de noviembre, la pediatra especialista en Nutrición y Diabetes, Dra. María Esther Ibañez de Pianesi, dialogó sobre la situación actual de la enfermedad en la infancia, los principales síntomas de alerta y los avances que mejoraron la calidad de vida de los pequeños pacientes.
“La diabetes tipo 1 es frecuente en pediatría. Es la que más vemos en consultorio”, explicó la especialista. Señaló además que, a diferencia de otros trastornos, “no hay manera de prevenir la diabetes”, ya que ocurre cuando el páncreas deja de producir insulina.
Sin embargo, remarcó que sí es posible evitar la diabetes tipo 2, que está vinculada a hábitos alimenticios: “Hay que cuidar la alimentación, reducir harinas refinadas, azúcares y gaseosas”.
Síntomas a los que las familias deben prestar atención:
La doctora insistió en que la detección temprana es fundamental. Entre los signos más comunes mencionó:
- Sed excesiva
- Micción frecuente, incluso volver a mojar la cama
- Hambre extrema
- Pérdida de peso inexplicable
- Fatiga
- Visión borrosa
“La diabetes tipo 1 puede aparecer a cualquier edad. Mi paciente más pequeño fue un bebé de 8 meses”, recordó. También aclaró que la enfermedad no es hereditaria, aunque existen genes que predisponen a desarrollarla.
Avances tecnológicos que marcaron un antes y un después
En relación al tratamiento, la pediatra fue contundente: “El único tratamiento válido es la insulina inyectable”. No obstante, resaltó que los avances tecnológicos trajeron alivio y mayor control para las familias: “Lo que marcó un antes y un después fue la llegada del sensor, que nos permite tener una visión clara de lo que pasa con el paciente en tiempo real”.
A esto se suma el Programa Provincial de Prevención y Control de Diabetes, que impulsa el acceso a estos dispositivos. “En el Hospital de Pediatría de Posadas tenemos 130 pacientes, y el programa ayuda muchísimo”, afirmó.
Costos y acompañamiento
Sobre el gasto que implica acompañar a un niño con diabetes, explicó que “lo más caro suelen ser los insumos”, pero destacó que las obras sociales y el programa provincial alivian de manera significativa esos costos. Por eso, la especialista insistió en que el punto clave sigue siendo reconocer los síntomas a tiempo y acudir de inmediato a una consulta profesional.
